¿Tienes una agencia o diriges la producción en una? Entonces, es posible que ya conozcas un gran truco para ahorrar tiempo y dinero a la hora de adquirir fuentes: no hace falta que vuelvas a comprarlas ni a adquirir sus licencias nunca más. Sí, como lo lees.

En el diseño grafico es muy emocionante crear una nueva marca o actualizar una existente, ya que puedes poner en práctica tus habilidades creativas y estratégicas. ¡Tienes la oportunidad para mostrar tu talento sin caer en estas ocho trampas!

Además de decidir la paleta de colores y el estilo de las imágenes, puedes elegir los tipos de letra fundamentales para la marca. Sin embargo, la selección de fuentes no solo debe basarse en el aspecto.

Los diseñadores y las diseñadoras que han experimentado problemas de legibilidad debido a la baja resolución, o bien se han enfrentado a la falta de glifos, entienden perfectamente la importancia de recurrir a tipos de letras de alta calidad de fundiciones y especialistas en diseño de renombre. Sin embargo, las personas ajenas al ámbito creativo no comprenden las ventajas de pagar por las fuentes. ¿Cuántos y cuántas profesionales de la creación habrán escuchado alguna vez en su carrera «utiliza una fuente gratis»?

El personal de diseño gráfico y otros miembros del equipo creativo suelen ser quienes más usan las fuentes en una marca. Por ello, también son los responsables de asegurarse de que se utilicen de acuerdo con su licencia.

Hay prácticas que ya son cosa del pasado, como comprimir carpetas de archivos de fuentes para compartirlas con el resto de la organización o, lo que es aún más engorroso, incrustar las fuentes en los documentos que se suben a la nube con la esperanza de que el diseño se mantenga intacto. Hace poco anunciamos una ampliación de los derechos de licencia que permite a la plantilla de una organización acceder a fuentes de producción comerciales en entornos de escritorio.

Bauer Media Group, una empresa internacional multisectorial que cuenta con cientos de propiedades digitales e impresas, implementó Monotype Fonts para proporcionar fuentes a cientos de equipos y miles de empleados de todo el mundo.

En un capítulo reciente de nuestro pódcast Creative Characters, la conversación se centró en cómo la futuros que imaginamos no siempre son factibles en la realidad en la que vivimos (tanto en las películas de ciencia ficción como en las fuentes de los salpicaderos de los coches).

Hace poco, un célebre fabricante de automóviles detectó problemas de visualización en las pantallas de sus vehículos, en las que se usaba la fuente Helvetica Now de Monotype. El fabricante nos dio acceso a su plataforma y sus herramientas de integración porque le preocupaba que los problemas se debieran a errores de diseño de los contornos de Helvetica Now.

Kevin Laurino, director de producción de arte e impresión, retoque y acabado en Netflix, comparte algunas de las experiencias que ha vivido con las fuentes a lo largo de su carrera y cómo lidiar con el desafío que supone gestionar las licencias de fuentes de una marca. Aquí encontrarás varios consejos para ponerte manos a la obra.

Los artistas se dejan el corazón y el alma en sus obras y creaciones. En un mundo ideal, todos deberían obtener el reconocimiento y la remuneración adecuada por su esfuerzo. Sin embargo, en la realidad, suelen tener que pelear para que se respeten sus derechos. Esta situación lleva siglos siendo así, y la era digital no está haciendo más que empeorarla.

El presente y el futuro de esta icónica empresa de ferrocarril están presentes en su tipografía corporativa.